Angustia o pánico y agorafobia.
¿Qué es el trastorno de angustia o pánico? ¿Y la agorafobia?
La angustia o pánico también puede llamarse ataque de pánico o crisis de angustia. Es preciso diferenciar las crisis o ataques de pánico del trastorno de pánico, o también llamado trastorno de angustia. Es decir, el trastorno de pánico también se llama trastorno de angustia, y las crisis de angustia también se llaman
crisis de pánico. Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el trastorno de pánico y las crisis de pánico? Es muy sencillo. Una crisis de pánico o de angustia es un episodio aislado caracterizado por la aparición brusca de un malestar o miedo intenso relacionado con síntomas somáticos. Es decir, a la persona que sufre este mal le entra un miedo intenso relacionado con la idea de que se va a morir, porque cree que le va a dar un ataque, una especie de infarto. Este miedo está reforzado porque la persona siente palpitaciones, mareos, se le acelera el pulso y la respiración, lo que le refuerza la idea de que va a sufrir un ataque inminente. El trastorno de pánico o angustia se caracteriza porque las crisis son recurrentes, es decir, se repiten con el tiempo. Así pues tenemos que las crisis son los episodios puntuales, el trastorno es recurrente.
Entonces, ¿qué es la agorafobia?
Hay mucha confusión con respecto a lo que es la agorafobia. Tradicionalmente se ha dicho que es un miedo a los espacios abiertos. Realmente es algo parecido, salvo que no es fobia a los lugares abiertos sino a los lugares públicos. La diferencia radica en que también se incluyen sitios o lugares donde hay mucha gente, y no tiene que ser precisamente un lugar abierto, puede ser un sitio cerrado, que esté lleno de gente. La agorafobia está estrechamente ligada a la idea de que si en ese momento la persona sufre una crisis de pánico, no va a poder escapar del lugar, ser rescatada o ayudada por los servicios de emergencia. Por lo tanto no es sólo miedo a los lugares abiertos, aunque este miedo también se incluye entre los que definen la agorafobia. A este miedo se le acompaña la creencia de que se va a sufrir un ataque, un desmayo, un infarto o a perder el control. Por lo tanto la agorafobia es algo más complejo que el miedo a los lugares abiertos, aunque como ya hemos dicho, está relacionado y los incluye.
Ejemplos de crisis de pánico sin agorafobia.
Vamos a describir un caso de una crisis de pánico o angustia sin agorafobia. Carlos es muy buen estudiante. Se ha estado preparando el examen de ingreso a la universidad durante mucho tiempo, y lo lleva muy bien. A medida que se ha ido acercando la fecha, cada vez que piensa en que le queda menos tiempo empieza a agobiarse. Este agobio le va a más, y empieza a sentir una especie de opresión en el pecho, con palpitaciones, sudores y fuertes mareos. Carlos cuando está sufriendo este ataque cree que se va a desmayar y que le va a pasar algo malo muy pronto, por lo que tiende a buscar un sitio donde se sienta más seguro. Normalmente acaba sentándose o acostándose en el suelo, porque tiene miedo a desmayarse, perder el conocimiento y golpearse contra el suelo. Una vez se le pasan los síntomas acostado o sentado en el suelo, llama a alguien para que le ayude, normalmente a su madre o a su padre.
¿Por qué no tiene Carlos agorafobia? Muy sencillo, porque la crisis de pánico no le ha dado en un lugar público, ni tiene miedo a no poder escapar o a que le rescaten en un lugar aglomerado de gente.
Ejemplos de crisis de pánico con agorafobia.
En este caso veamos una crisis de pánico con agorafobia. Sonia está deseando que llegue el fin de semana porque va a ir a un concierto de su grupo favorito. Realmente la idea de ir al concierto le da miedo, pero le gusta tanto el grupo que va a correr el riesgo de ir. Cuando está en el concierto, que es un pabellón polideportivo, cuando se encuentra entre la gente tiene la sensación de que si le da un ataque o si sucede algún accidente, no va a poder salir a tiempo, ni tampoco va a poder ser rescatada a tiempo para ser ayudada. Empieza a agobiarse, a sudar y a tener palpitaciones, por lo que decide abandonar el concierto ante el temor de que pueda darle un ataque o a que se desmaye de manera inminente. Sonia tiene agorafobia porque le sucede en un lugar público, en un lugar lleno de gente.
Aclaraciones.
Es necesario aclarar que tanto los ataques de pánico como la agorafobia pueden darse en multitud de situaciones diferentes, y que no hay una norma clara que los defina. Es decir, cada caso es particular, porque a cada persona le sucede de manera muy personal. Esto se debe a que la experiencia de cada persona es única, así por lo tanto la terapia es individualizada. Hay que decir que el pronóstico es bueno, y sin fármacos. Si te sientes reflejado con estos síntomas y quieres solucionar estos problemas, no dudes en contactar, juntos pondremos fin al malestar que sufres.